domingo, 24 de junio de 2012

ENTRE LAS LLUVIAS Y LA NADA

ELIBETH EDUARDO
La naturaleza, de nuevo, se opone. A pesar de que en el gobierno hay una abundante colección de encuestas que se empeñan en convencernos de que no hay nada que hacer el 7 de octubre salvo aceptar el (inevitable) triunfo del líder del proceso, algo no anda bien para ellos y sus salas situacionales.
Sólo eso puede deducirse del hecho insólito de que, en cadena nacional, el salvador de la patria haya reconocido al país como el quinto más violento y el segundo en homicidios del universo mundo. Claro, mantiene que la buena noticia es que han diminuído los índices en los delitos menores aunque lo más probable sea que disminuyó la denuncia de los mismos... pero eso es otro cuento.
Nada: afirmarle al país que la inseguridad es un hecho y no solo una "sensación" amplificada al infinito por los medios de la burguesía es más que el reconocimiento de un enorme fracaso que le ha costado la vida a casi 120 mil venezolanos en los 14 años de desgracias que rodean a este gobierno.
Significa que, insólitamente, responde a la propuesta de la nada (oposición) y su candidato... no vaya a ser que alguno de sus seguidores le parezca que es un plan bueno y con sentido.
La hipótesis anti-triunfalismo es, también, la única que explica que, después de casi un mes de silencio "convaleciente", el paciente se la eche de curado y hable, hable y hable, mucho y a cada rato, siempre y cuando no se mencione el tema de un posible debate entre él y el candidato de la "nada".
De eso no se habla... Ni-de-vaina.
Y es esa renuencia a volver polvo cósmico al "majunche sin discurso" en un debate que pueda ver todo el planeta, la mayor demostración de que el triunfalismo es táctico pero (a Dios gracias) no hay que tenerlo por cierto.
INVIERNO EN VERANO
Las complicaciones no terminan para las salas situacionales. Mientras la prensa recoge todas la leyes que el Magnífico no ha debido aprobar a través de una Ley Habilitante que era una respuesta (en teoría) a la emergencia por las lluvias del 2010, los ingratos de los damnificados se empeñan en poner en evidencia con sus protestas que la Gran Misión Vivienda es puro cuento y hasta los obreros de la misma se atreven a protestar en Fuerte Tiuna. Ingratos y desclasados, juguetes del imperio! Qué bolas!
Por si fuera poco, las lluvias se adelantan a la crisis normales del invierno y ya en Táchira, por ejemplo, ha caído en un día el 10 por ciento de lo que suele caer en un año, contribuyendo a que lo poco que quedó en pie desde el 2010 se venga abajo antes de que comiencen las peores lluvias.
Malas condiciones para una campaña que, ni siquiera, está en su comienzo oficial.
O sea...
ATAQUES RASTREROS
Por ello los esfuerzos desesperados en colocar cualquier tema por encima de las lluvias y los apagones... que estaban incluidos en la habilitante y quedaron por debajo de los damnificados en cuanto a prioridad.
No, el cambio del COPP, de la Ley del Trabajo, de la que rige al Cicpc y hasta la Ley de Comunas, junto con los satélites chinos y los aviones no tripulados eran más importantes en la escala de Voldemort.
Pero llegó la campaña y su terco y absurdo empeño en la evaluación de la gestión. Desde ese punto de vista, que haya localidades en la frontera con del Táchira que tengan 6 meses sin agua o que San Cristóbal y sus adyacencias pasen hasta un día sin luz se vuelve de repente (quien lo diría!) en algo importante... que el gobierno no tiene como resolver, mucho menos con rapidez.
Y, entonces, la respuesta que desmiente las encuestas: Trujillo, el apacibe y pequeño estado que tiene todo el período votando por Chávez, de repente, se declara en rebeldía.
Fuertes disturbios en Valera y la capital dicen, a gritos "ya basta" a la ineficiencia, la corrupción. La desidia. El abandono.
Dos días sin luz y los trujillanos escalan a las primeras planas de todos los diarios. A quien culpar? Las iguanas ya están muy vistas... Quizás sea por eso que pasaron de los reptiles a los marsupiales pero sin perder de vista a la especie predominante de este gobierno: los rastreros que se escabullen con facilidad, siempre a nivel del barro y el rodapié.
Despúes de esta semana tan terrible no es de extrañar que, desde temprano, tengamos a Shemel, a Jesse y a Seijas señalando que Voldemort gana con ventaja de 8000 por ciento.
Es lo que pasa siempre que las concentraciones opositoras han sido aún más inocultables que los fracasos del gobierno.
Amanecerá y... los veremos.
Eso si, sin debate porque, ante la realidad, de hecho, es poco lo que el gobierno puede decir.
Menos que "la nada" y sin atenuante por circunstancias.

Sent from my BlackBerry® smartphone

domingo, 10 de junio de 2012

VOLVER AL FUTURO

ELIBETH EDUARDO

Sin importar que la inscripción de la candidatura del actual Presidente sea digna del Oscar a los Efectos Visuales (especiales) del año, este domingo 10 el país recordó las grandes manifestaciones que sacaron - brevemente - del poder al Voldemort en el 2002.
Quienes hablan de la "apatía" y la "pasividad", la "tolerancia" de los venezolanos de cara a procesos como el de los "Indignados" olvidan que el pais vivió desde marchas imponentes hasta "guarimbas", pasando por un mes de paro nacional parcial, mucho antes de que el primer mundo descubriera que la felicidad podía no ser un bien adquirido para todos ellos. Que podía no ser total. Ni eterna.
Pero, dejemos de lado a los "indignados" de la misma manera que el mundo ignoró las angustias de la mitad de los venezolanos en el 2002..
Durante la pasada semana una pregunta se movía de grupo en grupo por toda Caracas: "tú vas?" o "De dónde sales tú?". Familias se pasaban pines y mensaje de convocatoria, negociaban puntos de encuentros y se repartían la dotación de agua y refrescos... Hasta los más escépticos tuvimos la impresión de que el slogan calaba y "algo bueno" estaba pasando.

ESOS 10 MILLONES QUE TODOS SOÑAMOS
Y, si bien todos esos preparativos apuntaban hacia una convocatoria exitosa, la manifestación del 10J superó, ampliamente, los sueños de los más optimistas. Fue estremecedora.
Por un instante, los 10 millones de votos parecieron ser una posibilidad más cercana para la oposición que para el gobierno, mas allá de los (justificados) miedos de Carlos Blanco (@calorbalncog) de que se reconozca el triunfo electoral.
Fijaré, en este punto, la que ha sido mi posición siempre: no es fácil esconder un millón de votos. Ni quinientos. Inclusive 100 mil.
Con mucha arre... despecho, Voldemort calificó como "victoria de mierda" el triunfo en la Reforma Constitucional... y todavía quedó como un 15 por ciento de actas sin escrutar por lo que hay que presumir que eso es el mínimo que estaban dispuestos a reconocer. No más.
Ganar apretado es casi perder... porque el gobierno es totalitario, se cree ungido de una misión celestial por su carácter "revolucionario" y, además (como ha demostrado cientos de veces) es mal perdedor.
Por eso no basta sacar la mayor cantidad de votos posibles (elemento esencial para ganar): hay que tener testigos en la mayor cantidad de mesas posibles y estar dispuesto a estar en la calle hasta que el triunfo se reconozca. El modelo de Ucrania que desvela al gobierno tiene que estar en nuestro imaginario... por más que este domingo pareciera, oliera... se sintiera como un triunfo.

LA PESADILLA DE LAS ENCUESTADORAS
Pero, por una tarde, se es rico vivir un primer triunfo: que las concentraciones y marchas sean noticias de abrir en CNN y BBC, que el gobierno invente que las marchas eran un maratón pro-ambiente. Que le toque responder. Que se coloque a la defensiva.
Mientras tanto, será interesante ver como los analistas y encuestadores gubernamentales hacen lectura de lo ocurrido: los primeros, sin duda, dirán que no ocurrió y que todo es un montaje. Los segundos, más elaborados, encontrarán "bases" demográficas para señalar que la manifestación, aunque grande, fue absolutamente irrelevante. Lógica e inofensiva.
Impresionante pero poco representativa.
Es decir, infinitamente menos importante que los 3 millones de followers en Twitter de Chávez.
Whatever. Algo bueno está pasando y, ahora, más que nunca el "el Tú y 2+" de quienes votamos en las primarias pareciera sufiente para cambiar el estado actual de cosas y salir del camino que nos lleva a la (superada) Guerra Fría y al caos que elegimos como colectivo - lamentablemente - hace 14 años.
El 7 de octubre podremos recuperar el sueño de ser un país mejor. Volver al camino que, por cierto, no sólo tiene obstáculo sino, también, destino.
Regresar a la realidad real mientras salimos de la fantasía revolucionaria. Volver al futuro.
Sent from my BlackBerry® smartphone

domingo, 3 de junio de 2012

Efecto CATIA

ELIBETH EDUARDO
No es octubre, es junio. La hora de la verdad ocurre, en principio, en esta mitad de año y no hacia al final, como piensa la mayoría.
No es accidental que el oficialismo se haya esforzado tanto por crear una matriz de opinión que apuntaba a dividir a la oposición con la esperanza de que se "cambiara" al candidato opositor o, al menos, hubiese otra candidatura.
El tema de Leopoldo López primero y el triunfo de Capriles Radonsky sobre los adecos después parecía terreno fértil para esto. No ha sido así.
A pesar de las encuestas, de la objeciones al candidato y de algún comentario (siempre se puede contar con papá Salas) sobre que la debilidad oficialista le quita urgencia a la Unidad, es precisamente la alternativa democrática la que tiene, sin lugar a dudas, un candidato único.
Porque, digan lo que digan, del lado oficial no se sabe - por ahora - si podrán tener a Chávez de titular.
Triste. Pero cierto.
UNA VOZ EN EL TELÉFONO
Conscientes de esta debilidad, el oficialismo, luego de las primarias, hizo todo lo que se le ocurrió para debilitar al adversario y no solo al candidato como tal: ha propiciado toda suerte de rumores de división desde la desersión adeca hasta las "reuniones" para cambiar el caballo (electo) en mitad del río de la campaña.
Tiros, insultos y encuestas han sido, por supuesto, las armas más evidentes. Nada: Capriles Radonsky, con persistencia judía, ni pisa conchas de mango ni cede ni se rinde.
Trabaja como bestia. Camina como bestia. Hace mucho y habla poco... pero fuerte y claro, contrastando con el "inusual" silencio del lado oficial que los 140 caracteres de twitter, de vez en cuando, no alcanzan a tapar.
Por eso las distancias (si las hubo) se acortan y acercan peligrosamente al empate técnico. Peor: GIS XXI sabe que ninguno de los "delfines" (incluyendo a la mayor de las hijas) puede derrotar al candidato opositor pues el 47% de los votantes "chavistas" y/o beneficiarios de misiones votaría por el gobernador de Miranda si Chávez no se postula.
Por eso los aspirantes a herederos corren de un lado a otro tratando de demostrar que si calan mientras ponen afiches y otras zancadillas.
Por eso el mismísimo Comandante bajó el tono y pidió dejar de lado los triunfalismo. Por eso abrazan la Ley de Misiones como si fuera suya; intentan decir que combaten al hampa y "aceleran" la entrega de viviendas.
Por eso tratan de neutralizar los 3 millones de votos (duros) opositores con el mismo número de seguidores en Twiter de @chavezcandanga. Se toman medias "populares" y efectistas; regulación de alquileres, locales comerciales, medicamentos, funerarias. Seguro pronto irán, de nuevo, tras colegios y clínicas tratando de que avance opositor no haga inviable cualquier intento de fraude menor.
Se sueña y se habla de 10 millones de votos. Ántes no lo lograron.
Ahora piensa en el T+2.
EXPROPIAR A POBRES
No obstante, la acumulación de errores, desidia e ineficiencia ha logrado convertirse en una significativa complicación para el problema electoral: quieren mejorar la movilidad... pero autopistas, avenidas y carreteras están en el suelo y repararlas genera cola. Es decir, el problema empeora.
Las reparaciones mínimas indispensables para dejar el Metro óptimo supondrían cerrarlo 2 meses... cosa de la que no vale la pena ni hablar: pesadilla total.
Hacer algo real para mejorar la seguridad supone más presos... cuando, más bien, se busca "liberar" legal o fortuitamente a los que ya están. Y las "complicaciones" podrían continuar.
Las más grandes, tal vez, han ocurrido en torno a la Gran Misión Vivienda: no es fácil convencer del proverbial "sabotaje" en el caso de las paredes caídas en la novísima Ciudad Caribia... que deja horrorosamente mal paradas a las petrocasas de la revolución bonita.
Pero lo peor es lo de la Calle Panamerica de Catia: el empeño de construir a troche y moche en Caracas los coloca en (graves) aprietos por el espacio.
Sin importar las simpatías que puede generar el que se reubique a los damnificados, expropiar carpinterías, fruterías y tiendas de zapatos a punta de mandarria es una imagen que podría indicar que tal acción fue suguerida por el enemigo.
Quizás la idea era disimular el ataque implacable a Empresas Polar... como si los casos de Barquisimeto y la Vinotinto dejarán lugar a dudas.
Como sea, llegó la hora de inscribir candidaturas y demostrar fuerza, tanto física como electoral. Y la alternativa democrática llega, contra todo pronóstico, fuerte y unida.
Quizás eso ayude a resolver el tema de los pequeños comerciantes de la calle Panamerica esta semana.
Sino, la amenaza de que "ahora van por ti y tu casa"... que tanto daño hizo en las 2 campañas anteriores quedará válidada por la miopía de Jorge Rodríguez. Tal vez por su avaricia.
La cuenta regresiva comienza sin que Chávez pueda "correr" hasta el CNE, mientas su rival planea cerrar Caracas con 8 puntos de salida para las distintas marchas lo largo de la ciudad.
No sorprendería que el punto 9 sea la calle Panamerica para consagrar, definitivamente, lo que ya se avizoró en las primarias opositoras, el sueño de Fausto Masó (@faustomaso): la pérdida definitiva del chavismo de los sectores populares.
El fenómeno de Petare... que ya ocurrió.
Ahora, el Efecto Catia.
Te lo pedimos señor.