ELIBETH EDUARDO
Recientemente veía en televisión una (muy mala) película que, por su nombre, pensé que podía ser una variación interesante en un género que, francamente, me seduce poco como es el terror-suspenso por monstruos, fantasmas y esas cosas. Vale destacar que esta es la categoría a la que pertenecen "El Exorcista", "Poltergeist", "El Aro" y que se cubrió de gloria con el estupendo guión de "Sexto Sentido" el cual hasta recibió un Oscar. En esta misma categoría, suelo perdonarle la vida a Stephen King aunque no me gusten todas las producciones sobre sus libros.
La película en cuestión - "El No Nacido" - tenía a uno de mis actores favoritos (Gary Oldman), la belleza de su protagonista (Megan Fox) y a la Kabalá como gancho, aprovechando que están de moda los estudios sobre este libro sagrado y sus conexiones con el funcionamiento del universo. Punto. Ningún otro mérito.
Sin embargo, el tema en torno a la Cábala pero, sobre todo, la visión sobre los espejos como portales "que descorren el velo" de la muerte y/u otras dimensiones me recordó los ritos de los gitanos en cubrir fotos y espejos, así como los muchos cuentos, de hadas o no, que hacen referencia a estos peculiares objetos.
DE LOS GRIMM A CHEJOV
Probablemente el cuento más famoso en tener una "proyección" descomunal del sí-mismo sea el mago de Oz... que logró un "truco de espejos"... sin espejos.
Por su parte, Lewis Carroll le regaló a la humanidad la expresión "del otro lado de espejo", como referencia a un mundo que es idéntico pero contrario al nuestro gracias a la trama de su "Alicia"...
Del mismo modo, es indiscutible que el espejito de la bruja de Blancanieves es el oráculo universal para saber si el status quo goza de buena salud y las cosas se mantienen como siempre han sido.
No obstante, mi favorita sobre el tema es el cuento de Anton Chejov en el cual no se pregunta sino que, abiertamente, se acepta una mentira, una deformación de la verdad sólo porque es hermosa... porque nos gusta lo que vemos.
Así, en el "Espejo curvo" se privilegia la mentira y se le transforma en delirio: se le prefiere a la realidad. Se contempla con placer una falsa belleza. Se elige, voluntariamente, vivir en la locura...
Y LA CAMPAÑA AÚN NO COMIENZA...
Manifestaciones que recuerdan largamente todas las fantasías asociadas a los espejos se están viendo, día a día, en las filas de un desconcertado sector oficial que no acepta siquiera la posibilidad estadística de una derrota.
Lo curioso es que siempre pensé que el delirio era sólo del gran líder: lo veía como a Hitler ordenando la movilización de "ejércitos" que no llegaban ni a batallones. Cuadrillas apenas y en el mejor de los casos.
Ahora es Carlos Blanco (@carlosblancog) quien nos cuenta como parte de la nomenklatura en el poder habla de la "movilización" de fuerzas extranjeras del antiguo eje socialista que el gobierno ha "cultivado" como aliados, petrodólares por delantes: estás fuerzas no "permitirán" (junto con los cubanos) un cambio de manos en el poder.
Quienes a esto apuestan con tal seguridad señalan que esas "fuerzas" extranjeras contribuirán a la legitimación internacional... aunque no estemos en la OEA y se prueben los vínculos de la élite con el narcotráfico: el respaldo de las Fuerzas Armadas Bolivarianas y estos "socios" extranjeros, bastan en un principio... si acaso ocurriera la "locura" (Maduro dixit) de que se perdiera la elección.
No importa que los "colectivos" armados del gobierno duden de las mismas FAB ni que los aliados del continente no estén dispuestos ni siquiera a aceptar la ridícula propuesta de una Comisión Interamericana de DDHH paralela... el discurso sigue siendo el mismo:
- Espejito, espejito: quienes son los revolucionarios más bonitos, respaldados por la fuerzas más grande del universo para manterner al V Reich (República) por más de mil años?...
Libranos, por siempre, señor...
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